EL cáncer de mama es una enfermedad que se produce cuando las células que recubren los conductos y los lobulillos, comienzan a crecer de manera anormal. Si las células malignas proliferan en los lobulillos, se denomina cáncer de mama lobulillar y si lo hacen en los conductos, se llama cáncer de mama ductal. No obstante, en la mama se pueden localizar otros cánceres que no se originan en los lóbulos o conductos mamarios. Se pueden dar variantes de cáncer como los linfomas, los sarcomas, los melanomas o lesiones malignas de piel, aunque su frecuencia es mucho más baja. También en la mama puede haber metástasis de otro cáncer, es decir, células malignas, que proceden de un cáncer que está fuera de la mama.
Menos del 0,5% de estos tumores de la mama corresponden al llamado Linfoma no Hodgkin. De forma general, estos linfomas mamarios son de células B (linfocitos B). No obstante, se han descrito algunos casos raros en el mundo de estos linfomas formados por células T (linfocitos T) en pacientes sin implantes mamarios.
El Linfoma Anaplásico de Células Grandes (LACG) es un raro tipo de cáncer linfático o linfoma no Hodgkin que se caracteriza por un crecimiento anormal de linfocitos T (células T) y la expresión de la proteína CD30. Puede afectar a una gran variedad de tejidos incluyendo la mama y que actualmente está englobado dentro de una amplia categoría de trastornos linfoproliferativos con un amplio espectro de comportamientos clínicos. Existen dos variantes de LACG, una el LACG sistémico con linfoadenopatías y afectación extranodal y otra el LACG cutáneo en la que la enfermedad está limitada a la piel. La histopatología del LACG no es uniforme. Ambas variantes expresan el marcador CD30, sin embargo existen diferencias en cuanto a la expresión del marcador ALK (proteína linfoma anaplásica kinasa). El 60-80% de los LACG sistémicos son ALK +, el resto son ALK-. La expresión o no de esta proteína va ligada al pronóstico de la enfermedad, teniendo las formas ALK+ un comportamiento pronóstico más favorable que las formas ALK-. Es precisamente la forma ALK-negativa la que se relaciona con los implantes mamarios.
El LACG asociado a implantes mamarios (Breast Implant-Associated Anaplastic Large Cell Lymphoma (BIA-ALCL)), consiste en la aparición de un LACG en una mujer portadora de implantes mamarios. La clave diagnóstica es la presencia siempre de células malignas infiltrando la cápsula periprotésica o en el líquido periprotésico. Se postula que el LACG se desarrolla a partir de los linfocitos que participan en la formación de la cápsula fibrosa que se forma alrededor del implante mamario como consecuencia de la reacción del organismo a un cuerpo extraño. Histológicamente el BIA-ALCL presenta la expresión del marcador CD30 y generalmente presenta una ausencia de expresión de la proteína ALK (ALK -).
Así, el LACG relacionado con implantes mamarios en la mayor parte de las ocasiones se podría afirmar que no se trata de un verdadero cáncer de mama sino de un Trastorno Linfoproliferativo relacionado con la cápsula periprotésica, ya que la cápsula periprotésica no forma parte del tejido de la glándula mamaria. El LACG relacionado con implantes mamarios en la mayor parte de los casos tiene una forma de presentación mucho menos agresiva que el LACG no relacionado con implantes, estando en la mayor parte de los casos confinado a la cápsula periprotésica. Es una enfermedad de comportamiento indolente y buen pronóstico.
Fue en enero de 2011 cuando la Agencia Norteamericana responsable de la vigilancia de medicamentos y dispositivos médicos (U.S. Food and Drug Administration, también conocida como FDA), emitió por primera vez un informe preliminar acerca de la posible asociación entre un raro tipo de cáncer linfático, el Linfoma Anaplásico de Células Grandes y las mujeres portadoras de implantes mamarios. Desde entonces, algunas informaciones publicadas en la literatura científica en los últimos años han sugerido una posible asociación entre los implantes mamarios y la muy rara aparición de un trastorno linfoproliferativo denominado linfoma anaplásico de células grandes (BIA-ALCL por sus siglas en inglés), sin que, a día de hoy, pueda establecerse una firme relación causal.